Muffin de Nesquik de fresa

Hace mucho tiempo que quería hacer esta receta, pero me faltaba el ingrediente principal: Nesquik de fresa. Pero por fin lo he encontrado! Y con lo que me ha costado, ahora lo veo por todas partes…. Así que si os apetece hacer esta receta no creo que os cueste mucho encontrarlo, yo lo compré en Carrefour, aunque últimamente lo he visto en otros supermercados.
La receta la he sacado de la web Objetivo: Cupcake Perfecto y es muy muy sencilla de hacer.
Ingredientes (para 12 muffins):

– 115 g de mantequilla a temperatura ambiente

– 220g de azúcar

– 2 huevos

– 220g de harina

– 1 cucharadita y media de levadura

– 120 ml de leche semi desnatada

– 4 cucharadas de nesquik de fresa

Empezamos precalentando el horno a 180º.

Tamizamos la harina con la levadura y reservamos.

A continuación batimos la mantequilla con el azúcar hasta que se quede una mezcla uniforme.

Ahora añadimos los huevos uno a uno. Hasta que el primero no se haya integrado en la mezcla no añadiremos el segundo.

Mezclamos la leche con el Nesquik que quedará de un rosa bastante fuerte.

Añadimos la mitad de la mezcla de la harina a la masa de mantequilla, azúcar y huevo batimos a velocidad baja y cuando quede una mezcla uniforme añadimos la leche, de igual manera después volvemos a añadir lo que nos ha quedado de harina.

Preparamos una bandeja para hornear muffins o cupcakes con los papelitos para estos y los rellenamos hasta 2/3 partes.

Horneamos entre 20-25 minutos, o hasta que al insertar un palillo este salga limpio.

Dejamos enfriar dentro del molde durante 10 minutos y los colocamos en una rejilla donde los dejaremos enfriar del todo.

Y ya están listos! En la receta original, Alma los hace en forma de cupcake y luego le añade un buttercream también de Nesquik de fresa. Yo no se lo hice porque bastantes excesos hemos tenido ya este verano…

 

Muffin de Nesquik de fresa

Bundt de limón

En general, los bizcochos de limón nunca han sido mis favoritos. Los encuentro «clásicos». Ojo, que un clásico no tiene que ser malo, pero en repostería me gustan las cosas más modernetas.

Me animé a hacer este bundt porque el limonero de mi padre estaba cargadito de limones y algo había que hacer con ellos. Y ahora que lo he hecho, no me arrepiento en absoluto. De clásico nada, tiene un sabor increíble, riquísimo. La verdad que os lo recomiendo a todos, seáis o no amantes del limón.

Esta receta la he sacado del libro Primrose Bakery Book y es la siguiente:

Ingredientes:

– 155 gr de harina todo uso

– 1 cucharadita de levadura

– 155 gr de azúcar blanquilla

– 20 gr de harina de maíz (Maicena)

– 155 gr de mantequilla a temperatura ambiente

– 3 huevos

– ralladura y zumo de un limón

Precalentamos el horno a 180º.

Tamizamos la harina con la levadura y la harina de maíz y reservamos.

Mezclamos el azúcar con la mantequilla con una batidora eléctrica durante unos tres minutos aproximadamente.

Creo que todavía no lo he dicho, pero para conseguir que la mantequilla esté a temperatura ambiente o estilo pomada, ahora en invierno lo que hago es meterla en el microondas durante unos 25-30 segundos. En verano con dejarla fuera de la nevera entre 30-45 minutos antes de usarla es suficiente.

Seguimos.

Añadimos los huevos, uno a uno, sin incorporar el siguiente hasta que el primero se haya integrado por completo. E incorporamos también el zumo y la ralladura del limón.

Esta mezcla será muy líquida.

Incorporamos poco a poco la harina mientras se bate a velocidad baja.

Vertemos la mezcla en el molde bundt previamente engrasado con aceite y enharinado y lo horneamos durante 35-40 minutos. Antes de retirarlo del horno comprobamos que esté listo insertando un palillo en el centro. Si este sale limpio el bundt está listo. Sino lo dejamos unos 5 minutos más.

Lo dejamos enfriar dentro del molde durante 5 minutos. Le pasamos por los laterales la punta de un cuchillo y lo desmoldamos con cuidado. Lo dejamos enfriar sobre una rejilla hasta que esté frío por completo.

Ahora lo podemos servir así o si queremos darle un toque más a limón podemos preparar la mezcla que señalan el el libro para repartir sobre el bundt.

Ingredientes:

– zumo de dos limones

– 160 gramos de azúcar

Mezclamos los ingredientes y con una cuchara lo repartimos sobre el bundt. El zumo de limón lo absorverá el bizcocho y el azúcar (con sabor a limón) se quedará encima.

Bundt de limón

Bundt Caza-Hombres

Bundt

 

Seguro que el título de este Bundt te ha llamado la atención. A mi también me la llamó cuando lo ví por primera vez. Según la autora de la receta (Bakemanía), este Bundt tiene este nombre porque no hay quien se resista a él, y además todo aquel que lo prueba acaba repitiendo. De esto puedo dar fe. Todos los que lo han probado han acabado repitiendo, porque sinceramente está muy muy bueno.

Aunque no deja de ser un bizcocho clásico, muy fácil de hacer, con ingredientes que solemos tener por casa; este tiene una textura y un sabor que lo hacen especial y diferente al «clásico bizcocho de yogurt», con todos mis respetos hacia este que buenas alegrías me ha dado.

Como comentaba antes esta receta la he sacado del blog Bakemania una artista en el mundo de la repostería y tengo marcado su blog como uno de mis favoritos, de referencia, vamos.

Pues sin más paso a detallar la receta, que me he permitido el lujo de hacer pequeños cambios de la original:

Ingredientes:

  • 225 gr de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
  • 400 gr de azúcar
  • 5 huevos grandes
  • 375 gr de harina
  • 1 cucharadita de bicarbonato
  • 1 cucharadita de sal
  • 250ml de Buttermilk
  • 2 cucharaditas de extracto de vainilla
  • 3 cucharadas de zumo de limón

– Empezamos precalentando el horno a 160º y engrasando nuestro molde Bundt.

– Tamizamos la harina, el bicarbonato y la sal. Reservamos.

– Batimos durante un minuto la mantequilla con el azúcar, hasta que nos quede una mezcla homogénea.

Bundt

Bundt

– Añadimos los cinco huevos. Uno a uno. No añadimos el segundo hasta que el primero no se ha mezclado por completo.

Bundt

Bundt

– Incorporamos la harina en tres veces, alternando con el buttermilk, terminando con la harina. Es decir, incorporamos un tercio de la harina, la mitad del buttermilk, el segundo tercio de harina, etc.

– Por último añadimos las cucharadas de zumo de limón y el extracto de vainilla.

– Volcamos la masa a nuestro molde Bundt, alisando la parte superior para que nos salga uniforme.

– Horneamos durante 70 minutos. Antes de retirarlo insertamos un palito en el centro para comprobar que está hecho, sino, lo dejamos cinco minutos más en el horno.

Bundt

– Dejamos enfriar dentro del molde durante 15 minutos. Después lo desmoldamos y dejamos enfriar sobre una rejilla durante 45 minutos aproximadamente antes de servir o hasta que se haya enfriado por completo.

Y listo!

Bundt Caza-Hombres

Hummingbird Cake o Tarta de Colibrí

He intentado averiguar un poco sobre el origen de esta cake por internet, pero la verdad es que no he encontrado gran cosa. Al parecer fue inventado hace poco más de décadas por una ama de casa del sur de Estados Unidos y actualmente se ha convertido en uno de los cake de referéncia.

Yo la primera vez que lo ví fue en la web de El Rincón de Bea y me pareció una receta muy original, a base de unos ingredientes poco utilizados (a la vez, no por separado) en repostería y que de esa mezcla seguro que sugiría un bizcocho estupendo.

La receta de Bea está pensada para hacer un layer cake, pero yo que todo lo transformo decidí hacer un bizcocho estilo loaf, que me encantan.

Al ver tantos ingredientes puede parecer una receta más compleja, pero en absoluto es así. Empezamos:

Ingredientes:

– 225 gr. harina
– 1 cucharadita canela
– 1/2 cucharadita de bicarbonato
– 1/2 cucharadita sal
– 50 gr. nueces muy picadas
– 50 gr. coco rallado
– 100 gr. azúcar blanquilla
– 100 gr. azúcar moreno
– 1 huevo más 1 yema
– 155 gr. piña al natural escurrida
– 3 plátanos hechos puré
– 125 gr. aceite de maíz
– 1 cucharaditade extracto de vainilla

– Empezamos precalentando el horno a 175º y engrasando nuestro molde elegido. Yo lo hago con aceite de maíz y harina.

– Picamos las nueces bien picadas, pero sin llegar a hacerlas polvo.

– Trituramos el plátano y la piña hasta hacerlos puré y reservamos.

– Tamizamos la harina, el bicarbonato, la sal, la canela, el coco y las nueces y reservamos.

– Batimos el huevo y la yema con los dos tipos de azúcar hasta que el azúcar se haya disuelto.

– Incorporamos el aceite, extracto de vainilla y el puré de plátano y piña y batimos hasta conseguir una mezcla homogénea.

– Le añadimos en dos veces la mezcla de harina que habíamos reservado, sin excedernos en ello. Si fuera necesario lo podríamos terminar a mano.

– Vertemos la mezcla en el molde de loaf y horneados durante aproximadamente 45-50 minutos.

– Antes de retirarlo del horno comprobaremos que esté listo insertando un palito en el centro, si este sale seco ya estará listo, sino lo dejamos 5 minutos más.

– Dejamos enfriar dentro del molde y sobre una rejilla durante unos 5 minutos. Después desmoldaremos y dejaremos enfriar por completo sobre una rejilla.

Es un bizcocho de sabor un poco peculiar, pero para bien, porque está riquísimo!!

Espero que lo intentéis hacer en casa.

Elena

Hummingbird Cake o Tarta de Colibrí

Cookies con chips de chocolate

Muchos de vosotros conoceréis estas galletas. Incluso más de uno/a ya las habrá hecho alguna vez en casa. Sin duda son mis galletas preferidas y por lo que he podido comprobar, también lo son en mi casa.

Son bastante sencillas de hacer y además con ingredientes muy básicos que todos podemos disponer fácilmente en casa. Son un buen remedio para llevar siempre a casa de algunos familiares, amigos, etc.

Pues vamos manos a la masa!

Ingredientes (48 galletas aproximadamente):

– 220 gr de harina

– 1/2 cucharadita de levadura

– 1/2 cucharadita de bicarbonato

– 1/2 cucharadita de sal

– 125 gr de mantequilla a temperatura ambiente

– 125 gr de azúcar blanquilla

– 105 gr de azúcar moreno

– 1 huevo L

– 1 cucharadita de extracto de vainilla

– 185 gr de chips de chocolate

– 125 gr de nueces cortadas a trozos pequeños

Precalentamos el horno a 180º y preparamos dos bandejas de horno con papel de hornear.

Tamizamos la harina, la sal, el bicarbonato y la levadura y reservamos.

Batimos la mantequilla con el azúcar blanquilla y moreno, hasta que consigamos una mezcla esponjosa.

Añadimos el huevo y la vainilla a baja velocidad.

Agregamos poco a poco la harina a esta mezcla mientras batimos también a velocidad baja hasta que se hayan integrado todos los ingredientes por completo.

Ahora con una espátula añadimos las gotas de chocolate y los trozos de nueces y lo mezclamos todo manualmente. Una vez tengamos la masa preparada, con la ayuda de una cuchara vamos poniendo bolitas de esta en la bandeja para hornear a una distancia de unos 5 centímetros entre cada bola porque en el horno se expanden y no queremos que se nos peguen. Horneamos durante 12 minutos y dejamos enfriar las galletas en una rejilla hasta que se enfríen.

Así puse yo las galletas antes de hornear:

Y así quedaron después de hornear:

Cookies con chips de chocolate

Loaf de plátano y chocolate

Creo que he perdido la cuenta de los bizcochos tipo loaf que llevo hechos. También creo que he perdido la cuenta de las receta del libro The Primrose Bakery Book que llevo hechas porque todo lo que sale de ese libro tiene un resultado espectacular. Y este desde luego no fue ninguna excepción.

La mezcla de sabores, del chocolate y del plátano, en mi opinión es perfecta y hacen que este bizcocho sea idóneo para comer tanto en un desayuno como en una merienda.

Sin entretenerme más paso a detallar los ingredientes:

– 125 gr de mantequilla a temperatura ambiente

– 250 gr de azúcar

– 2 huevos L

– 1 cucharadita de extracto de vainilla

– 250 gr de harina

– 2 cucharaditas de levadura

– 4 plátanos maduros hechos puré (si son muy grandes yo podría tres)

– 175 gr de chocolate

Precalentamos el horno a 170º. Y engrasamos nuestro molde con aceite y lo enharinamos un poco.

Empezamos troceando el chocolate (se pueden utilizar también gotas de chocolate). Yo usé chocolate  con leche porque el negro no me gusta mucho. Mezclamos el chocolate troceado con el puré de plátano y reservamos.

Tamizamos la harina con la levadura y reservamos.

Con una batidora eléctrica mezclamos la mantequilla con el azúcar durante unos tres minutos, hasta que quede una masa uniforme. Yo la mantequilla siempre la caliento durante unos 20 segundos en el microondas, porque ahora con el frio no se queda muy blanda.

Sin dejar de batir incorporamos los huevos, primero uno y luego el otro. A continuación añadimos el extracto de vainilla.

Mientras la mezcla se sigue batiendo vamos incorporando la mezcla de la harina y levadura poco a poco, pero sin que quede demasiado mezclado. Sin prisa, pero sin pausa.

Con una espátula incorporamos el plátano y el chocolate a nuestra mezcla y lo integramos a mano. Lo volcamos sobre nuestro molde y horneamos durante 45 minutos. Antes de retirarlo del horno comprobaremos que está listo insertando un palillo en el centro.

Dejamos enfriar en el molde durante 5 minutos y seguidamente desmoldamos y dejamos enfriar encima de una rejilla hasta que se enfrie por completo.

Creo que este bizcocho también puede estar muy bueno servido cuando todavía esté un poco caliente.

 

 

 

Espero que os guste!

Elena

Loaf de plátano y chocolate

Bundt de chocolate con leche

Hola a todos! Ya han pasado estas fechas estupendas, pero aquí seguimos en Comparte Postres dejando cositas ricas para no perder costumbre.

La idea para esta entrada era la de hacer un bizcocho de plátano de Primrose Bakery, pero a veces las cosas no salen como uno las planea y el bizcocho estaba bueno (si, estaba porque ya ha desaparecido) pero al desmoldarlo se me rompió por todos lados y no había manera de sacarle una foto en condiciones, así que me puse de nuevo manos a la obra. busqué por la web de El Rincón de Bea, que sabía que allí encontraría algo riquísimo para hacer, ya que mi primera idea no había salido como me esperaba. Y allí encontré esta receta.

Ingredientes:

– 200gr de chocolate con leche

– 120 ml de sirope de chocolate

– 250 gr de mantequilla a temperatura ambiente

– 200 gr de azúcar

– 4 huevos L

– 1 cucharadita de extracto de vainilla

– 360 gr de harina

– 1 cucharadita de levadura

– 1/2 cucharadita de bicarbonato sódico

– 1/2 cucharadita de sal

– 250 ml de buttermilk

Empezamos:

– Precalentamos el horno a 160º

– Tamizamos la harina, el bicarbonato, la levadura y la sal. Reservamos.

– En un bol ponemos el chocolate con leche y el sirope de chocolate, lo derretimos en el microondas en tandas de 30 segundos, parando para remover entre tanda y tanda. Yo necesité tan sólo 1 minuto para derretirlo todo.

– Batimos la mantequilla con el azúcar hasta que consigamos una mezcla esponjosa, aproximadamente unos tres minutos.

– Incorporamos a la mezcla de la mantequilla los huevos. Uno a uno. No añadimos el siguiente hasta que el primero se haya integrado por completo en la mezcla.

– Mientras sigue batiendo incorporamos el chocolate derretido y el extracto de vainilla

– Incorporar un tercio de la harina y después la mitad del buttermilk. Repetimos hasta que hayamos terminado con la mezcla de la harina.

– Engrasamos con aceite y enharinamos el molde elegido. Vertemos la mezcla, procurando que la masa entre en todos los huecos que pueda tener el molde.

– Horneamos durante 55 minutos. Antes de retirarlo del horno comprobamos que esté listo insertando un palillo en el centro del bizcocho. Si este sale limpio ya podemos retirarlo, si sale húmedo lo dejamos 5 minutos más.

– Dejar enfriar durante unos 15 minutos en el molde. Pasar la punta de un cuchillo por los bordes del molde y desmoldar.

– Trasladar el bundt a una rejilla y dejar que se enfrie por completo allí.

 

Espero que os guste!

 

Elena

 

 

 

 

Bundt de chocolate con leche

Galletas de Jengibre – Hombrecitos de Jengibre

Feliz víspera de nochevieja a todos!

Tenía muchas ganas de publicar esta receta, y por fin hoy ha visto la luz.

Creo que de todos los productos de repostería lo que más me gusta hacer son galletas, sobretodo cuando tienes mucho tiempo para ello, porque aunque es bastante fácil de hacer, requiere su tiempo. No para hacer la masa, pero si para cortarlas, hornearlas y sobretodo, decorarlas.

Aquí os traigo una galleta un poco diferente, aunque seguramente la mayoría de vosotros ya las conoce o las ha visto en algún sitio. Yo las conocí cuando vi la película de Shrek y la verdad es que el muñequito me hizo mucha gracia, y unos años más tarde, aquí estoy, haciendo yo misma las galletas.

Antes de entrar al detalle de las galletas me gustaría explicaros un poquito más sobre estas típicas galletas. Os dejo aquí la descripción que hace Wikipedia:

«Un hombre de jengibre u hombre de pan de jengibre es una galleta hecha de pan de jengibre que suele tener una forma humana estilizada, si bien son comunes variantes con formas diferentes, especialmente de temas estacionales.

Historia:

El pan de jengibre procede del siglo XV, y la elaboración de galletas con forma humana se practicaba ya en el siglo XVI. La primera ocurrencia documentada de galletas de pan de jengibre con forma humana se dio en la corte de Isabel I de Inglaterra. La reina obsequiaba a las visitas importantes con galletas de pan de jengibre parecidas a ella.

Características:

Mujer y hombre de pan de jengibre decorado.

La mayoría de los hombres de pan de jengibre comparte la misma forma aproximadamente humanoide, paticorta y sin dedos. Muchos hombres de jengibre tienen cara, aunque los rasgos pueden ser hendiduras en la propia galleta o caramelo pegado en ella con glaseado o chocolate, según la receta. También son comunes otras decoraciones: pelo, puños de camisa y zapatos están presente a veces, pero con mucho la decoración más popular son los botones de la camisa, que tradicionalmente se representan con gomitas, glaseado o pasas.»

Busqué muchas recetas a través de internet, pero sin duda la que me convenció fue la de la web de Bea. Todo lo que he hecho de ella me ha salido genial, así que considero cualquier receta de esta página una garantía de éxito.

Ingredientes, para unas 30 galletas aproximadamente:

–          250 gr de mantequilla sin sal a temperatura ambiente

–          105 gr de azúcar moreno

–          125 gr de azúcar blanquilla

–          345 gr de melaza clara (yo le puse melaza o miel de caña oscura, porque no encontré otra en el supermercado)

–          1 huevo grande

–          780 gr de harina de repostería

–          1 cucharadita de bicarbonato sódico

–          1 cucharada de jengibre en polvo

–          1 cucharadita de canela en polvo

–          ½ cucharadita de nuez moscada en polvo

–          ½ cucharadita de sal

Preparación:

–          Batir la mantequilla hasta que esté esponjosa y añadir el azúcar hasta que se haya integrado perfectamente.

–          Seguir batiendo e ir incorporando la melaza poco o poco.

–          Añadir el huevo y seguir batiendo hasta que todos los ingredientes estén completamente integrados.

–          Tamizar la harina, la sal, el bicarbonato, el jengibre, la canela y la nuez moscada. Incorporar esta mezcla a la de la mantequilla poco a poco mientras seguimos batiendo, hasta que toda la harina esté bien mezclada con la mantequilla.

–          Como esta masa estará muy blanda y no se podrá manejar bien, hay que dejarla enfriar en la nevera durante un par de horas. Se puede dejar hasta dos días.

–          Una vez pasado este tiempo, procedemos a estirar la masa con un rodillo entre dos papeles de horno (o silpat, lo que tengamos).

–          Estiraremos la masa (hay que hacerlo en tres o cuatro partes) hasta que nos quede con unos 6 milímetros de grosor aproximadamente.

–          Con los cortadores damos forma a los muñecos y los colocamos sobre una bandeja de horno preparada con papel de hornear para que no se nos peguen.

–          Con el horno precalentado a 200º, horneamos las galletas durante unos  6-7 minutos, o hasta que veamos que están doraditos.

–          Dejar enfriar en la bandeja durante unos 5 minutos y traspasarlos a una rejilla para que se enfríen completamente. Este paso hay que hacerlo con un poco de cuidado, ya que las galletas quizás están todavía un poco blandas y se pueden desmontar. Hasta que no se enfríen no se quedarán completamente duras.

–          Repetimos la operación con el resto de la masa.

–          Las sobras de la masa las podremos reutilizar, aunque es preferible no hacerlo más de tres veces. Si se calienta la masa y se vuelve pegajosa, la podemos dejar unos 10 minutos en la nevera y volver a utilizar.

Yo estas galletas las decoré con glasa, que es como a mi más me gustan. Pero se pueden decorar con caramelos, gominolas, etc. Para prepara la glasa yo utilicé:

–          ½ clara de huevo

–          150 gr de azúcar glasé

Estas cantidades son más o menos orientativas. Primero batimos un poco la clara de huevo hasta que empiece a espumar y después añadimos la cantidad de azúcar que creamos necesaria para la cantidad de galletas que tengamos. Esta mezcla no ha de quedar muy líquida, la textura debería ser que si al cogerla con una cuchara y dejarla caer, cayera pero con lentitud. Si vemos que ha quedado muy dura añadimos más clara de huevo (o agua) y si nos ha quedado muy líquida añadimos más azúcar.

Cuando tengamos la mezcla lista, podemos separa en diferentes tarros y darles color con colorantes, pero yo en este caso quise que la decoración fuera toda blanca.

Colocamos la mezcla en una manga pastelera con una boquilla del 2 o del 3 (dependiendo del grosor que queramos para las líneas) y galleta por galleta vamos decorando al gusto. Dejamos secar durante tres o cuatro horas aproximadamente (yo las dejé toda la noche) y ya están listas para comer.

En mi caso estas galletas han sido todo un éxito. El sabor es muy peculiar, no tiene nada que ver con cualquier otro tipo de galleta que hayáis probado, es muy especiada y está riquísima. Además la forma que tiene y la decoración es muy divertida; seguro que a vuestros invitados les gustará.

Y ya para despedirme, desearos que paséis una feliz Nochevieja y los mejores deseos para el 2012!

Galletas de Jengibre – Hombrecitos de Jengibre

Bundt de nueces y gotas de chocolate

La receta que hoy os traigo no es una receta típica de Navidad. De hecho, diría que es una receta válida para cualquier época del año. Pero es que las celebraciones navideñas en muchas casas duran un par de semanas y está bien comer los dulces típicos de Navidad pero también es una buena oportunidad para empezar a hacer cosas nuevas.

Por eso he querido hacer esta receta, aparte de que le tenía muchas ganas desde que la vi en la web de El rincón de Bea. A mí las fotos no me han salido tan espectaculares y apetecibles como a Bea; de hecho, mi bundt está a años luz de ser tan apetitoso como el de ella, pero por algo se empieza y os aseguro que los que lo han probado me han dicho que está realmente bueno.

Os paso a detallar la receta:

– 250 gr de mantequilla a temperatura ambiente

– 300 gr de azúcar

– 420 gr de harina todo uso

– 1/4 cucharadita bicarbonato sódico

– 1/2 cucharadita sal

– 250 ml. buttermilk

– 2 cucharaditas extracto de vainilla

– 4 huevos

– 1 yema

– 100 gr. nueces picadas

– 100 gr. gotas de chocolate

La entrada original añade también 60 ml de bourbon, yo no le puse porque no tenía, pero creo que puede darle un buen toque al bizcocho.

Para hacer la masa seguimos los siguientes pasos:

– Tamizar la harina, el bicarbonato y la sal. Reservar.

– Batir la mantequilla con el azúcar unos tres minutos aproximadamente hasta conseguir una mezcla esponjosa.

– Mezclar el buttermilk con el extracto de vainilla.

– En un bol mezclar las nueces picadas y las gotas de chocolate. Añadir dos cucharadas de la mezcla del buttermilk y unos 30 gr de la mezcla de la harina. Mezclar bien.

– Ir incorporando a la mezcla de la mantequilla y azúcar los huevos y la yema uno a uno hasta que se hayan integrado bien. Como siempre, no añadir el siguiente hasta que no se haya mezclado bien el primero.

– Ir añadiendo, alternativamente un tercio de la harina, con la mitad del buttermilk, otro tercio de harina y así sucesivamente. Mezclando bien, pero sin que esté mucho ratio batiendo.

– Añadir con una espátula la mezcla de las gotas de chocolate y nueces y mezclar a mano bien.

– Engrasar un molde bundt de 25 cm con mantequilla o aceite (yo lo hice con aceite). Y verter la mezcla en el molde asegurándonos que no queden huecos sin masa.

– Hornear durante 45 minutos a 170º con el horno previamente precalentado.

– Estar atentos al horno y cuando pase el tiempo fijado introducir un palito, si este sale seco el bundt ya estará listo, si sale húmedo dejar 4-5 minutos más y volver a comprobar.

– Dejar enfriar dentro del molde y sobre una rejilla unos 10 minutos y a continuación desmoldar y dejar enfriar sobre una rejilla hasta que esté completamente frio.

Nota: si le queremos añadir bourbon a la receta, esto lo tendremos que hacer cuando preparemos la mezcla del buttermilk y el extracto de vainilla. Por lo demás seguir el mismo proceso.

Espero que os animéis a hacerlo y a que visitéis nuestra página de Facebook.

Elena

Bundt de nueces y gotas de chocolate

Galletas de Navidad

Pues como dijo Sara en su anterior entrada, ya hemos dado el pistoletazo de salida a las recetas navideñas. Y es que es una de las temporadas más bonitas del año y una no puede evitar intentar adelantarla un poco y empezar ya a cocinar postres relacionados.

He decidido empezar con una receta bastante sencilla. La cual no necesita muchos ingredientes y la elaboración es más simple de lo que pueda parecer. Además considero que es un dulce perfecto para regalar en estas fechas, suele gustar a todo el mundo y es perfecto para acompañar el café de las largas sobremesas de estas fechas.

Sin entretenerme más paso a desarrollar la receta:

– 500 gr de harina

– 250 gr de mantequilla tipo pomada

– 125 gr de azúcar glass

– 10 cucharadas de leche a temperatura ambiente

Es muy importante que la textura de la mantequilla sea de pomada, ya que si está más dura la receta no nos quedaría igual. Si hacemos estas galletas en verano, con dejar la mantequilla fuera de la nevera media hora antes de empezar sería suficiente, ahora como hace más frío quizás sea necesario meterla en el microondas durante unos 20 segundos aproximadamente.

Esta es la receta básica. Se pueden hacer modificaciones. En mi caso lo que hice fue hacer la mitad de los ingredientes por una parte, incorporando además una cucharadita de extracto de vainilla. Y a la otra mitad le quité 15 gr de harina (235 gr en total) y los cambié por 15 gr de chocolate en polvo sin azúcar (en este caso no incorporé extracto de vainilla). Con lo que me salieron la mitad de las galletas de vainilla y la otra mitad de chocolate.

Esta es la modificación que yo hice, pero se pueden hacer muchas diferentes (incorporar un poquito de canela en polvo, aromatizar con un chorrito de anís, con sirope de chocolate, etc). Sólo hay que tener en cuenta que si incorporamos ingredientes en polvo hay que quitar la misma cantidad de harina.

Estas galletas no llevan levadura, porque no nos interesa que crezcan, si fuera así se nos deformarían y no nos quedarían la forma que hemos elegido.

Para la elaboración a mano de esta receta se han de poner todos los ingredientes sobre una superficie limpia y lisa y se han de amasar hasta conseguir que todos los ingredientes se hayan incorporado por completo. Si lo hacemos con una batidora eléctrica, igual, todos los ingredientes a la vez en el mismo recipiente y batir hasta que nos quede una masa homogénea. No batir demasiado. Lo ideal es mezclarlos un poco con una batidora eléctrica y terminar de hacerlo a mano, porque si se bate demasiado quedarán duras.

Una vez tenemos la masa lista, la metemos de nuevo en un bol, la tapamos con un trapo seco y la dejamos en la nevera como mínimo durante un par de horas. Ya que esta masa está demasiado blanda y no se puede trabajar bien.

Pasadas esas horas, sacamos la masa de la nevera, la amasamos un poco con las manos para que entre en calor y colocamos sobre la mesa dos trozos de papel de hornear entre los cuales colocaremos la masa para estirarla con un rodillo, para que la masa no se nos quede pegada ni a la mesa ni al rodillo. En mi caso yo utilizo como base una especie de Silpat que compré en Ikea y que funciona genial para que la masa no se quede pegada en la mesa.

Como se puede observar en la fotografía en su día me fabriqué un par de palitos de madera para que así cuando estiro la masa todas la galletas me quedaran del mismo grosor (unos 0,5 cm), es como una especie de guía. Si no se dispone de ningún soporte intentar estirar la masa hasta que nos quede con un grosor de 0,5 cm aproximadamente.

Cuando ya tengamos la masa perfectamente estirada elegimos los cortadores de galletas que más nos gusten (en mi caso elegí el típico muñequito de Navidad, un bastón y el árbol de navidad). Y cortamos la masa intentando aprovechar al máximo la mayor cantidad de masa posible.

La masa que nos sobre la hacemos de nuevo una bola y la volvemos a estirar con el rodillo para seguir cortándola. Este proceso se puede hacer hasta un máximo de tres veces, si lo hacemos más veces la masa se nos calentarña demasiado.

Colocamos la masa cortada sobre una bandeja de horno. No es necesario poner papel de horno sobre la bandeja, ya que al llevar bastante mantequilla no se quedarán pegadas, pero a mi me gusta poner papel de todas formas, porque parece que así protejo un poco más la bandeja. No es necesario dejar mucha distancia entre las galletas, porque como he comentado antes estas no llevan levadura y no creceran.

Debemos tener el horno precalentado a 180º. Horneamos las galletas durante unos 15 minutos con el calor del horno programado arriba y abajo.

Cuando estén listas las dejamos enfriar sobre una rejilla para que no se humedezcan con el calor de la bandeja. Y volvemos a hacer otra hornada hasta que tengamos todas las galletas horneadas.

Mientras las galletas se enfrian vamos preparando la glasa para decorarlas. Estas galletas ya se podrían comer tal y como están pero decoradas le dan un toque más bonito y están más dulces.

Se pueden decorar con fondant o con glasa. Yo todavía no he probado de hacer nada con fondant, con el tiempo me animaré.

Los ingredientes para realizar la glasa son:

– 250 gr de azúcar glass

– 1 clara de huevo

– colorantes que necesitemos

Además de estos ingredientes se puede incorporar un chorrito de cualquier aroma.

Batir la clara hasta que haya espumado un poco y seguidamente incorporar el azúcar.

Lo más complicado que encuentro de esta receta es conseguir la textura adecuada de glasa. Las veces que la he hecho o me ha quedado muy dura o demasiado líquida, hasta que conseguí dar con la textura adecuada y que intentaré describir como pueda.

Hay dos tipos de texturas para decorar las galletas. La del bordeado, que es la que utilizaremos para los bordes y que hará de tope para que no se nos salga el relleno. Y la del relleno, que será un poco más líquida. Para modificar la textura deberemos ir añadiendo poco a poco agua a la mezcla y removiendo bien con una cuchara. Si nos pasamos de líquido se puede añadir más azúcar, pero lo ideal es ir incorporando el agua en poca cantidad para evitar eso.

No se si en la foto se puede apreciar bien la textura. Esta sería la del bordeado. Cuando dejemos caer un poco de glasa sobre el resto tenemos que ver que cae con cierta facilidad (aunque tiene que caer a un ritmo lento) pero que tarda en incorporarse al resto de glasa.

Ahora deberemos dividir la glasa en diferentes tarros según la cantidad de colores que queramos utilizar. En mi caso elegí los siguientes:

Utilizé color violeta, verde, amarillo y blanco (este lo que hace es blanquear todavía más el blanco de la glasa).

Rellené la manga pastelera con glasa de color blanco y dibujé los bordes de los bastones:

Por cierto, las boquillas que utilizo son de la marca Wilton. Para hacer los bordes utilizo las boquillas del número 2 y para el relleno las del número 3 y 4.

Después preparé el relleno de los bastones (y que utilizaría para decorar el resto de galletas) con los colorantes elegidos. Esta glasa, como he comentado antes ha de ser un poco más líquida, y se consigue añadiendo unas cuantas gotas más de agua. Sabremos que la textura es la correcta cuando al tirar con una cuchara parte la glasa al bol esta tarda en incorporarse del todo unos 10-15 segundos aproximadamente.

Con todas las mangas preparadas con los diferentes colores terminé de decorar el resto de galletas. Las decoré de varias formas distintas, para gusto los colores.

Estos son algunos de los ejemplos. Las galletas se han de dejar secar unas 8 horas aproximadamente, aunque depende de la temperatura de casa y si el relleno lo hemos hecho muy líquido o no.

Para que no se queden duras lo ideal es guardarlas en un tupper con tapa para que no les de el aire.

Espero que os animéis a hacerlas en casa y que nos comentéis que tal os han salido.

Saludos,

Elena

Galletas de Navidad